Después de varias pruebas e intentonas, para que el resultado final fuese el óptimo, decidimos combinar dos técnicas en su elaboración: por un lado trabajamos con las gominolas, como siempre (en este caso lenguas pica pica) y por otro lado, lo completamos con Fondant para que el acabado fuese más limpio, ya que para hacer los cristales no había ninguna gominola que se adaptase bien.
Por lo que nos pusimos manos a la obra. Tengo que reconocer que me dió bastante trabajo, ya que las lenguas se desprendían con facilidad y el hecho de trabajar con Fondant lo hizo un poco más engorroso. Pero al final me doy por satisfecha con el resultado, mejor de lo que esperaba ya que era un coche muy pequeño y conseguir el nivel de detalle era un tanto complicado.
Esperamos que les guste a nuestros pequeños conductores. Dentro de poco os enseñaremos los detalles para las niñas de esta misma boda.
Felicidades a todos los Juanes!!!
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